Es que aprender a maridar bebidas es todo un arte.
Equilibrio, sobriedad, textura, armonía, temperatura… son algunos aspectos que hay que tener en cuenta si quieres un buen maridaje, sin embargo este es nuestro consejo para tomar Marigold. Toma nota :
Marigold combina perfectamente con esos aperitivos con amigos que empiezan con un “yo no me puedo liar” y acaban entre risas ya de noche. Marigold sienta bien en boca cuando los labios te escuecen de tanto besar. Besos apasionados que te suben la temperatura. También casa con “vamos a quedar como amigos” y cuando te das cuenta, estás sin ropa y descubres que es la persona con la que quieres compartir tu vida.
Marigold también marida perfectamente entre generaciones. Esas generaciones que solo las separa los años pero les une todo lo demás. Padres e hijos hablando el mismo idioma y compartiendo el hoy y el ahora. Para paladares exquisitos recomendamos Marigold con atardecer. Busca un acantilado con vistas al mar. Marigold fría. Escucha el mar y disfrútalo. Los escalofríos están garantizados.
Y es que como puedes comprobar, Marigold marida con aquellos momentos que te hacen feliz. [RE]Vivelos siempre. Una y otra.