Durante el confinamiento todos nos hemos sentido dignos de alguna que otra estrella michelín: panes varios, bizcochos, emplatados creativos, etc… y las redes sociales se han convertido en nuestro mejor escaparate.
Por eso, queremos compartir contigo una receta de esas sencillitas, pero muy, muy rica. Una receta para quedar bien o para subirte el ego si decides prepararla para ti.
Toma nota de los ingredientes necesarios. Ponte el delantal que te regalaron tus amigos en tu cumpleaños (no comentemos el mensaje grabado, por favor) y ¡manos a la obra!
Ingredientes:
- 1 pechuga de pollo
- 4 zanahorias
- 250 gr de champiñones
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 vaso de agua
- 1 cucharada de soja
- 4 cucharadas de miel
- Sal
- Pimienta negra recién molida
- Harina
- Aceite de oliva virgen extra
- 3 tercios de Marigold
- 1 lima
¿Ya la tienes?…¡Empecemos!
Trocea la pechuga de pollo limpiando hebras. Salpimienta y enharina los trocitos (mejor que cada trozo sea de un bocado)
Calienta una sartén grande antiadherente (de esas que tienes guardadas en el horno) y cubre la base con aceite de oliva virgen extra. Echa el pollo troceado y remueve hasta que consigas ese color dorado tan apetecible. Retira en un plato con papel absorbente (tampoco es cuestión de añadir calorías innecesarias ¿no?) y resérvalo.
Corta la cebolla, las zanahorias y los dientes de ajo en juliana y rehoga en el mismo aceite que has usado para dorar el pollo. Dejar al fuego hasta el punto de cocción elegida, a nosotros nos gusta el punto crunch de la verdura pero tú decides. La sal y la pimienta la dejamos a tu elección.
Añade los champiñones laminados y el pollo que estaba reservado a la sartén junto con las verduras. Mientras todos los ingredientes se abrazan, calienta la miel un poco en el microondas y mezcla con la soja y el agua.
Echa la salsa en la sartén donde esperan todos los ingredientes y deja que se cocine a fuego lento unos 20 minutos.
Elige el plato, el salvamantel, la luz y emplata con ralladura de lima. Ya tienes tu foto de instagram preparada para degustar. Fácil, deliciosa y con gran sabor.
Sabemos lo que estás pensando. ¿Y Marigold? Tú no te has dado cuenta aún porque todavía no has hecho la receta, pero durante todo el proceso Marigold siempre ha estado presente.
Aprovechando que sacas los ingredientes de la nevera para prepararlos en la encimera, cogerás una Marigold fría. ¡Porque te estaba mirando!, pensarás. La abrirás y te acompañará durante toda la receta. Entre sorbo y sorbo irás preparando este delicioso plato. Y es que la vida sabe mejor si se acompaña con una Marigold.
Observación: confirma que tienes varias botellas de Marigold enfriándose en la nevera. No puedes quedarte sin el ingrediente principal. Si necesitas (RE)cargar te lo ponemos fácil: www.marigoldbeer.com
Paso 5 :
Llegamos al final de esta sencilla y deliciosa receta… ¡y más aún acompañada de una Marigold!
Por último se le añadirá a la verdura, de manera salteada los champiñones y junto a ellos el pollo troceado, la soja, la miel y el agua. Dejaremos cocinar a fuego lento un tiempo aproximado de 20 minutos.
¡Ya tienes tu pollo a la miel!
Disfruta de tu plato acompañado de una Marigold… ¡para que te entre mucho mejor!.
Y te preguntarás…¿En dónde encaja Marigol en todo esto?
Pues como has podido observar Marigol encaja antes, durante la preparación y mientras disfrutas del resultado de tu pollo a la miel.
Asi que, ya sabes donde conseguir tu Marigold: https://marigoldbeer.com/recarga/#recarga